River empató contra San Pablo en Brasil. El millo jugó un buen partido donde en la segunda mitad del segundo tiempo se notó que les faltaba un poco en la parte fisica. De todos modos se esforzaron para lograr un resultado positivo en un partido en el que tranquilamente se pudo haber ganado.
Tras un largo período de inactividad River tenia que regresar en la Copa Libertadores ante San Pablo como visitante.
Al principio del primer tiempo a River le costó un poco meterse en el partido. Recién tras el gol en contra de Enzo Perez River mostró su caracter y su juego.
Un primer disparo lejano de Julián Álvarez que obligó a revolcarse a Tiago Volpi. En otra jugada tambien fue protagonista Julián Álvarez quien tras recibir un pase filtrado de Matías Suárez asistió a Rafael Borré para que empujara la pelota a la red.
La firmeza de la última línea y la buena conexión entre los tres atacantes fueron las claves de un River que, cuando se asentó, apeló a su habitual estilo de presión en campo contrario para generar peligro.
En el segundo tiempo River se paró unos metros más adelante e impuso condiciones, con tenencia y mejor circulación, hasta que lógicamente empezó a quedarse sin energía.
El desgaste realizado después de un extenso receso derivó en que, promediando la segunda etapa, la iniciativa volviera a ser de los paulistas. River podría haber ganado este partido. A los 35 minutos del segundo tiempo Lucas Martínez Quarta capturó un balón perdido en el área, se lo cedió a Álvarez y el cordobés definió para poner el 2-1.
Lamentablemente 3 minutos mas tarde en una jugada desafortunada en la que tuvimos un par de errores defensivos San Pablo empató el partido.
Sobre el cierre, los dos tuvieron sus chances, pero el resultado terminó siendo justo por lo demostrado por ambos en el Morumbí.
